ROL DEL PRESIDENTE DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN ESTE CHILE DE OCTUBRE. AL SR. MINISTRO HAROLDO BRITO CRUZ.


EL ROL DEL PRESIDENTE DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE CHILE.
 
AL MINISTRO, SR. HAROLDO BRITO CRUZ.
 
Entendemos que, junto a Eduardo Novoa Monreal, Manuel de Rivacoba ha sido el más notable jurista que haya laborado en Chile en la segunda mitad del siglo XX.
 
De su legado, visible en www.manuel-de-rivacoba.blogspot.cl, resalta entender el Derecho teñido de valores y no como simple reunión de conceptos (tesis y práctica tan querida a las doctrinas conservadoras).
 
Asimismo, que la ley escrita permite captar lo jurídico, pero lo que verdaderamente lo constituye es el complejo de valores que inspiran, de principios que informan y de fines a que tiende el respectivo ordenamiento.
 
Y nos instruyó para hacer lo que se debe, cualquiera sean las circunstancias y consecuencias personales.
 
Don Haroldo Brito Cruz, hoy Presidente de la Corte Suprema de Justicia de Chile, fue alumno de Rivacoba; hace medio siglo ayudó -junto a otros entonces jóvenes estudiantes de Derecho- a revisar las pruebas de imprenta de una edición del Programa analítico de Manuel, según éste expresamente lo valoró.
 
Igualmente, si mal no recuerdo, durante la dictadura militar-empresarial, y como juez de Crimen de Viña del Mar, recibió un exhorto de un tribunal de Valparaíso para indagar la situación de un detenido en un recinto de la DINA-CNI, en el sector de Recreo. Y lo hizo.
 
Ahora, el sitio web del Poder judicial informa que, apenas dictado estado de emergencia, el ministro Brito regresó a Santiago, a su lugar de trabajo.

Conocemos lo que puede y no puede hacer como titular del Órgano Judicial. También la acción – en estos días aciagos- de jueces de Garantía respecto de los homicidios ya perpetrados.
 
Sabemos que hay jueces que por vocación y compromiso consigo mismos se esfuerzan en hacer su labor.
 
Sin embargo, me causa una extraña sensación no constatar, de parte del ministro sr. Brito, Presidente de la Corte Suprema de Justicia, una conducta pública -notoria y enfática-; ya con decenas de muertos en oscuras circunstancias.
 
Desgraciadamente, creo no estar desinformado.
 
Conducta verificable para otros como estando a la altura de esta realidad.
 
No sólo como máxima autoridad del Órgano público que revisa amparos y juzga responsables por homicidios o torturas, sino como autoridad nacional que procura inhibir su perpetración por aparatos de poder.
 
Que se los comunica, que hace presente su reproche, con la intensidad de la gravedad de lo oficialmente perpetrado.
 
¿Acaso tal proceder, más activo, es inconstitucional o ilegal?, ¿o está fuera de la esfera de sus atribuciones?
 
Es decir, actuar enfáticamente frente al abuso y la brutalidad tolerada y justificada por autoridades, que estimulan su perpetración y favorecen su impunidad.
 
La imperante circunstancia le necesita.
 
Frente a este auténtico terrorismo gubernamental, se requiere un papel muchísimo más activo de la máxima autoridad de uno de los Poderes más importantes del Estado, y el que, paradójicamente- está para garantizar el respeto de derechos esenciales, y no sólo para juzgar a sus responsables una vez perpetrados, con el daño ya hecho.
 
Acciones que dentro de sus atribuciones dejen claro a las otras autoridades instigadoras de la índole brutal e ilícita de su actividad, ya que no se ajusta a Derecho promover y practicar la tortura y el homicidio, y la infiltración para provocar acciones graves que les justifican acrecentar su represión y violación de derechos a civiles.
 
Eso no lo puede hacer un juez de Garantía, pero Ud. sí.
 
Representando a la autoridad política y militar (que hoy hace lo que se le antoja) que debe recapacitar y cesar su conducta ilícita; y en que late un larvado fascismo constatable mediante redes particulares, ya que la prensa y TV empresarial le oculta o desdibuja en su gravedad, lesionando en los hechos la libertad de información y de su acceso.

Sr. ministro: Usted hoy puede hacer mucho más para cambiar la reprochable historia conductal de quienes le precedieron en tal cargo durante la dictadura.
 
No hablamos de deberes morales o éticos, sino jurídicos.
 
Lo que el propio Ordenamiento intensamente le ha encomendado: tutelar bajo toda circunstancia los derechos esenciales de las personas (conocer y fallar amparos es sólo una parte de ello).
 
Más aun cuando poco o nada puede esperarse de la cúpula del Ministerio Público de Chile.

No es suficiente lo hecho.

Alfonso Hernández Molina.
23 de octubre de 2019.

Al Presidente de la Corte Suprema de Chile.

Un Derecho que no asegure un nivel apreciable y suficiente de convivencia
no puede ser calificado de Derecho (Manuel de Rivacoba).

Sr.
Haroldo Brito Cruz.
Presidente de la
Corte Suprema de Chile.

Más que señales de unidad (así se difunde) con quienes han acentuado la crisis social producto de una política económica ilícita en cuanto favorece al sector ya más favorecido a costa de los más pobres, Chile requiere decisión para frenar sus abusos y encubrimiento, y para desvirtuar la inducción a la guerra interna, de la que coparticipan -ilícitamente- grandes medios de prensa empresariales (y el latente veneno fascista), torciendo u ocultando la verdad.
 
Señales más acordes con la gravedad de la estrategia y violencia estatal desatada y la delictuosa inacción de entidades públicas frente a los verdaderos autores.

Ya es reprochable el aval judicial a pactos de impunidad (aun reconociendo que sus promotores radican en el Ministerio Público operando argucias procedimentales insertas en el nuevo Cpp.) respecto de graves y reiterados delitos perpetrados por agentes del gran empresariado. En cierto modo, también esta conducta judicial -que no debe imputar total responsabilidad procesal a la dirigencia del Ministerio Público (de la que poco o nada se espera)- ha alimentado indignación social y lo que hoy muchos chilenos manifestamos.
Acentuando justicia de clase. 
 
Lo advirtió el ministro Juica, y -reconocemos- lo estaría enfrentando el ministro Muñoz.

Como Presidente de la Corte Suprema, usted puede marcar un cambio radical respecto del comportamiento de quienes ocuparon tal cargo durante la dictadura.

INVITACIÓN LANZAMIENTO DE VOLUMEN N° 2 DE LA REVISTA LATINOAMERICANA PARA LA INTEGRACIÓN JURÍDICA. FACULTAD DE DERECHO DE LA UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES. VIERNES 18 DE OCTUBRE. SALÓN ROJO. 16 HRS.




INVITACIÓN



LANZAMIENTO DEL N° 2 DE LA

REVISTA LATINOAMERICANA

PARA LA INTEGRACIÓN JURÍDICA



FACULTAD DE DERECHO

DE LA

UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES

VIERNES 18 DE OCTUBRE

SALÓN ROJO. 16 HRS.